El Majestic del siglo XXI, todavía mejor
Basta con cruzar el umbral de Majestic Hotel & Spa Barcelona y adentrarse en su vestíbulo para constatar que el hotel de lujo con más historia de Barcelona ha cumplido un siglo en plena forma. Lo mejor de dos mundos convive en cada uno de sus espacios: Esa tangible sensación de lujo clásico, elegante, sin excesos, pero cálido y con identidad propia en cada detalle; y esa inmediata percepción de confort y prestaciones propias del siglo XXI, en una de las ciudades más cosmopolitas y acogedoras del mundo. El hotel que hoy pueden disfrutar miles de viajeros de todo el mundo es fruto de muchos cumpleaños bien llevados, sin pasos en falso que resten esencia a un alojamiento con alma, con la renovación total de sus espacios para adecuarlos al nuevo siglo.
La gran y más reciente reforma integral del hotel, tripulada por el diseñador Antoni Obrador, de Denario Diseño y Arquitectura, Majestic Hotel & Spa Barcelona supo dar un paso adelante cualitativo, manteniéndose fiel a ese aire de distinción propio de un establecimiento con carácter y personalidad.
11 tipos de habitaciones
Las posibilidades de alojamiento son múltiples, ya que el hotel ofrece un total de 258 habitaciones de 11 categorías, en función de su tamaño, prestaciones y ubicación. Las más numerosas son las Deluxe, de 20 a 25 metros cuadrados y con vistas al pintoresco patio de manzana típico del Eixample. Todas las opciones cuentan con aire acondicionado y calefacción, máquina de café Nespresso , baño de mármol, ducha de efecto lluvia, albornoces, zapatillas, amenities de baño, servicio de buenas noches, teléfonos, servicio de habitaciones 24 horas y WIFI gratuito.
Como nexo común, lino, algodón y trevira se imponen en los paneles tapizados de sus paredes, con tonos tostados, blancos y beiges, un mobiliario clásico y baños en atemporales mármoles grises y blancos.
Las Privilege, de hasta 40 metros cuadrados y con capacidad hasta tres adultos o dos adultos y dos niños, las Privilege Family, también ideales para la familia. O las Junior Suite Paseo de Gracia, de más de 40 metros, y también óptimas para más de dos personas, con un espacioso salón diferenciado.
Subiendo aún más el listón, la mayoría de las Majestic Suite, de 45 a 65 metros cuadrados ofrecen panorámicas sobre el Paseo de Gracia y la Casa Batlló. Mientras que las cinco Penthouse de la 9ª planta (que antes ocupó la vivienda de la familia propietaria) dibujan un área privada para los clientes más VIP, con superficies de 100 metros cuadrados, fantásticas terrazas y una fusión equilibrada de mobiliario antiguo y contemporáneo.
Como joya de la corona, la Majestic Royal Penthouse es la suite más grande de Barcelona, con 467 metros cuadrados y dos terrazas que certifican doble vista al Paseo de Gracia y el templo de la Sagrada Familia. En su amplio salón hay sofás con cabida para 14 personas, comedor, bar y dos dormitorios dobles (ampliable a tres), un espacio único firmado también por Obrador. Posiblemente con el mejor Maxi bar de la ciudad, adaptado a todas las preferencias del cliente durante su estancia. Otras sorpresas son la inolvidable fragancia del hotel, Musc Éternel, o los tejidos de Ralph Lauren y Gancedo, jacuzzi en la terraza de Zuchetti…
Para los huéspedes con discapacidades severas y movilidad reducidas, Majestic también ha creado una habitación adaptada que incorpora sistemas electrónicos en numerosos mecanismos, sin perder la elegancia estética del resto del hotel.
